QUÍMICA: REDOX Y PIROTECNIA

Buenos días desde Academia Cruellas. Hoy nuestro foco de atención son los fuegos pirotécnicos. Un proceso pirotécnico es, fundamentalmente, una combustión. Sin embargo, mientras que en las combustiones ordinarias el oxígeno procede del aire, en las mezclas pirotécnicas forma parte de los reactivos. De esta forma, el calor liberado queda mucho más confinado y se alcanzan temperaturas más altas.
Las mezclas pirotécnicas están formadas, básicamente, por una fuente de oxígeno (el oxidan) y un combustible (el agente reductor). Cuando ambos se combinan, se produce una reacción de transferencia de electrones (redox).
El combustible utilizado para producir destellos de luz blanca suele ser un metal reactivo: por ejemplo, magnesio. Las partículas sólidas del óxido metálico, formadas en la oxidación del combustible, alcanzan temperaturas superiores a 3000 ºC.
Entre los oxidables más utilizados figuran el clorato y perclorato de potasio.
Los compuestos pirotécnicos emiten luz gracias a tres procesos fundamentales: incandescencia (radiación de cuerpo negro), emisión atómica y emisión molecular. La incandescencia se produce cuando las partículas, sólidas o líquidas, presentes en la llama pirotécnica se calientan a una temperatura muy elevada. Cuanto más alta es ésta, menor es la longitud de onda de la radiación emitida y mayor su intensidad. La emisión atómica y molecular se produce cuando, debido al calor generado en la combustión, se excita un electrón de un átomo o molécula, respectivamente, existentes, en forma de vapor, en la llama pirotécnica. El electrón, entonces, regresa rápidamente a su estado fundamental, apareciendo el exceso de energía en forma de radiación.

Comentarios

Entradas populares de este blog

"El arte de ser humano" por Fernado Savater

Henning Brand

PRUEBA LIBRE DE BACHILLERATO: LA POLISEMIA