HISTORIA: EUROPA 1348

"Es una bulliciosa ciudad; a ella vienen con mercaderías desde todos los países marítimos y continentales. No hay como ella en ningún país (...). Allí está la iglesia de Santa Sofía así como el Papa de los griegos, ya que éstos no profesan la religión del Papa de Roma. Hay allí tantas iglesias como número de días tiene el año y una incalculable cantidad de dinero que anualmente traen, como impuesto, de las dos islas, de las fortalezas y de las grandes capitales que hay allí. Riqueza tal que no se encuentra en ninguna iglesia del mundo..."

De esta forma describe el judío Benjamín de Tudela la ciudad de Constantinopla unos treinta años antes de su conquista por parte de los cruzados (1204). La consecuencia de esta riqueza fue su saqueo y destrucción, y con ello, el declive del Imperio Romano de Oriente. Mientras tanto, en Europa ¿qué ocurre? El Papa Inocencio III (1160-1216) consigue imponer la doctrina teocrática que defiende la supremacía del poder espiritual sobre el temporal.

A principios del siglo XIII la balanza está claramente a favor del Papado ya que el ejército imperial es derrotado en Bouvines al año 1214. Federico Ii ha fracasado en su intento de reinstaurar el Imperio, ya que el fortalecimiento progresivo de las monarquías nacionales (sobre todo Francia e Inglaterra) y el régimen municipal de las grandes ciudades, resultan incompatibles con el ideario universalista del emperador, pero al mismo tiempo Inocencio IV, a pesar de sus intentos por mantener la política de su antecesor, pierde influencia en las monarquías europeas.

La gran novedad en el panorama político europeo de mediados del siglo XIII radica en la afirmación del poder real que va a tener gran importancia en determinados países. Así, por ejemplo, tras imponerse a otros señores feudales, Luis IX de Francia consigue organizar sus instituciones y el gobierno central. París, designada capital del reino, se convierte en centro político, administrativo y económico. Cosas parecidas suceden en Inglaterra en Nápoles, Castilla, Aragón,....

Frente a estas tendencias centralizadores, en Italia y Alemania la situación es completamente distinta. En Italia, las ciudades-república rivalizan económica y políticamente entre sí. Por otro lado, el papel cohesionador que el Papa podía haber ejercido desde Roma desaparece, al trasladarse éste con su Curia a Aviñón en 1309. En Alemania, que carece también de capital, el feudalismo va a fortalecerse cuando decae en otras zonas.

Un Saludo desde Academia Cruellas, en Fraga

Comentarios

Entradas populares de este blog

"El arte de ser humano" por Fernado Savater

Henning Brand

PRUEBA LIBRE DE BACHILLERATO: LA POLISEMIA