Esta es una obra impresionista realizada por Auguste Renoir. La obra representa una escena del baile realizado en La Galette, un café parisino frecuentado por artistas y modistillas. El autor copia del natural y pinta una fiesta popular, con personajes bohemios. Parece haber una inclinación por lo banal, quizá como reacción a la pintura realista burguesa. La obra capta un instante, lo que supone un rasgo característico del impresionismo, que significó una constante investigación en el arte para responder a los interrogantes individuales y colectivos y para adaptarse a los cambios del mundo moderno. Abrió el camino a la desmaterialización y adaptó la pintura a las nuevas percepciones: la imagen se observaba cada vez más rápida por la influencia del concepto de velocidad, consecuencia a su vez de los nuevos medios de transporte y de la aceleración del ritmo de vida y de los acontecimientos históricos. El cuadro, realizado al óleo, es espléndido, no sólo por la pintura en sí sino porque